El desprendimiento del tapón mucoso es la señal de que el parto se acerca.
A la mayoría de las mujeres, cuando van a dar a luz por primera vez, lo del tapón mucoso les suena raro. ¿Cómo será?, ¿sabré reconocerlo?, ¿tendré que estar atenta para salir pitando al hospital si lo expulso?….
En fin que te agobias un poco, como con todas esas “señales de parto” de las que te han hablado en los cursos de preparación, sobre las que has leído, o te han comentado otras madres. Lo digo, porque a mí también me pasó y menos mal que me había informado, (ya se sabe, la información siempre es la mejor arma).
La función del tapón mucoso es de protección para el feto frente a los gérmenes. Cuando el cuello del útero se dilata, se produce el desprendimiento del tapón, total o parcialmente. Si esto ocurre, no es una señal de alarma, tranquilidad, aún puede faltar hasta más de una semana para el parto.
De todas formas muchas mujeres no se enteran de cuando lo han expulsado. A mí me ocurrió esto en mi segundo parto, (seguramente estaba más liada, pendiente de mi niña de año y medio), pero en el primero sí fui consciente de su expulsión. Lo reconocí, ¡qué lista! Y mantuve la calma, ¡qué brava! Bueno, no duele claro, ni nada de eso. Era una sustancia marroncilla, espesa, con algún hilito de sangre. Tardé dos días en dar a luz.
Eso sí, hay que acudir de inmediato al hospital en caso de tener hemorragia, y otra cosa, evitad las relaciones sexuales y los baños después de haber expulsado el tapón mucoso, para que no se produzcan posibles infecciones.