Después del parto, conviene que la pareja espere entre tres y cuatro semanas antes de reanudar la actividad sexual. Ese es el tiempo que suele tardar en cicatrizar la herida de la episiotomía. Es fundamental que ambos estéis de acuerdo a la hora de reanudar las relaciones sexuales. Es común que, hasta que vuelva la menstruación, la mujer presente sequedad vaginal.
Antes de reanudar las relaciones sexuales, la pareja debe esperar a que la episiotomía esté completamente cicatrizada y la pelvis haya recuperado su estado anterior al embarazo. Este proceso se consolida en las 3 ó 4 semanas posteriores al parto.
Generalmente es preferible esperar a la revisión puerperal en consulta y comprobar que todo está bien. Conviene tratar este tema con el médico para evitar posibles malentendidos y decepciones.
Es importante que la mujer se encuentre bien física y emocionalmente y actuar de forma suave y progresiva en un lugar tranquilo, olvidando las prisas. Lo más importante es que la pareja esté completamente de acuerdo y decidida a reanudar su actividad sexual.
Es normal que durante el tiempo que esté dando el pecho a su hijo o hasta que le vuelva la menstruación, la madre note sequedad en la vagina. Esta sequedad se debe al bajo nivel de hormonas que tiene durante el postparto. Existen cremas y aceites lubricantes que se pueden aplicar hasta que de nuevo se produzca una lubrificación natural.
También puede ocurrir que, tanto el hombre como la mujer, hayan perdido momentáneamente el interés sexual debido a la excitación y al cansancio acumulado desde que nació el bebé. En estos casos la imaginación juega un papel importante y se pueden probar formas y posturas nuevas para hacer el amor.
En ocasiones la mujer siente un rechazo al sexo por temor a que la herida de la episiotomía se abra, al dolor, a un nuevo embarazo, a la presencia del bebé en la habitación conyugal,… Estos obstáculos se superan por lo general con el tiempo y mediante la comunicación en la pareja. En caso contrario, conviene que consulte a un especialista.
Algunas mujeres sienten dolor en el coito. Si esto ocurre se dice que existe una dispareunia. Puede deberse a causas físicas (algún problema con la episiotomía) o psicológicas (miedo al dolor, a un nuevo embarazo,…). La mujer debe consultar este problema con el especialista para que le oriente sobre la posible solución.