El 23 de abril es el día que la UNESCO eligió, en 1995, para rendir homenaje a la lectura y conmemorar la figura del libro. A propósito de esta celebración, desde elbebe.com quisimos realizar una encuesta entre nuestras ususarias, la cual nos reveló algunos datos de interés. Recuerda que hacer de la lectura una rutina facilitará que el bebé muestre interés por los libros a medida que crezca.
La Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura) fue el organismo responsable de elegir el 23 de abril como fecha para celebrar el Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor.
La elección de este día coincide deliberadamente con la fecha del casual fallecimiento de tres grandes escritores de la Literatura Universal: el inglés William Shakespeare y los españoles, Miguel de Cervantes e Inca Garcilaso de la Vega.
En el elbebe.com también queremos aprovechar este día para animar a todos los padres a que inicien a sus hijos en la lectura desde temprana edad.
Una encuesta realizada entre nuestras usuarias señala que cerca de un 60% de nuestras madres lee un cuento todos los días a su hijo o bien lo hace 3 o 4 veces a la semana. En el lado contrario se encuentra el 21% de los padres que lee un libro rara vez frente a un 20% que no lo hace nunca.
La argumentación de algunos de los padres es que no tienen tiempo después de sus obligaciones diarias o que sus hijos no muestran interés por la historia, aunque sí por los dibujos y las ilustraciones. Una de nuestras madres señala: » mi hijo tiene un año y dos meses (…) No tendría ningún incoveniente en leerle cuentos, pero considero que es muy chiquitito, aunque es posible que esté equivocada».
Algunos padres piensan que los bebés no pueden apreciar un libro porque no saben leer. No olvidemos que la lectura es fundamental para el aprendizaje del bebé o niño y cuánto antes iniciemos a nuestros hijos en la lectura, más sencillo les resultará aprender a hablar, a comunicarse o expresarse. Los libros además estimulan su desarrollo intelectual, su creatividad y ayudan a incrementar su capacidad de concentración.
Desde los primeros meses del bebé podemos tomar como costumbre leerle un cuento todos los días. Hacer de la lectura una rutina facilitará que nuestro hijo muestre interés por los libros a medida que crece, y que no se convierta en una obligación, sino en algo cotidiano y placentero.
Si todavía es muy pequeño centrará toda su atención en los dibujos e ilustraciones, querrá tocar el libro y manipularlo. Dedícale unos minutos y muéstrale aquello que quieres que recuerde o aprenda. Por ejemplo, los perros hacen «guau, guau» al tiempo que señalas al animal. También puedes leer el texto y utilizar diferentes entonaciones para captar su atención y evitar que no se distraiga con otro juego.
Por otra parte, a los niños les encanta escuchar repetidamente aquello que les gusta y disfrutan con la repetición. Así ocurre con sus películas de dibujos favoritos, con sus juegos o con las historias que les contamos cuando son pequeños. De esta forma, ¿por qué no empezar a leerle un libro todos los días?