Algunos medicamentos de uso cotidiano pueden resultar muy nocivos cuando estás embarazada. Especialmente durante los primeros meses de gestación, debes consultar con tu médico antes de ingerir cualquier medicamento. Algunos fármacos pueden inducir un aborto espontáneo o provocar malformaciones irreversibles en el bebé.
Durante todo el embarazo y especialmente durante los primeros meses en que se desarrollan los principales órganos del feto, se debe evitar la ingestión de medicamentos, incluida la aspirina. Algunos fármacos pueden provocar malformaciones en el bebé o abortos espontáneos.
Por ello, cuando una mujer crea estar embarazada, no debe tomar medicinas o anticonceptivos orales y debe consultar cuanto antes con su ginecólogo. Si sufre una enfermedad crónica que requiera un tratamiento continuado, debe hablar con su médico antes de quedarse embarazada.
El SITE (Servicio de Información para la Embarazada) ofrece información sobre los factores de riesgo para el desarrollo del embrión y del feto. Se pueden realizar consultas en el 913 877 535 en días laborables.
Es esencial adoptar una serie de actitudes y medidas preventivas antes y durante el embarazo. Ponerlas en práctica antes de la concepción ayuda a reducir los riesgos de defectos congénitos.