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jueves, diciembre 12, 2024
Lactancia MaternaLactancia materna prolongada: ¿podría aumentar el riesgo de caries en el bebé?

Lactancia materna prolongada: ¿podría aumentar el riesgo de caries en el bebé?

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La relación entre lactancia materna prolongada y la aparición de caries en el bebé es un tema de gran controversia. Un nuevo estudio, publicado en «Annals of Epidemiology», aconseja seguir investigando sobre el tema y establecer unos hábitos de higiene bucodentales desde la salida del primer diente del bebé.

Algunos expertos creen que existe una estrecha relación entre la lactancia materna prolongada y la aparición de caries en los bebés humanos. Esta relación es un tema de gran controversia. Resulta curioso que la mayoría de mamíferos alimentados con leche materna no presenta caries en sus dientes. Sin embargo, se ha comprobado que los animales cuyas dietas se han humanizado, empiezan a tenerlas. De las 4.640 especies de mamíferos que existen, solo los humanos tenemos caries.

A pesar de que la lactancia materna es fundamental para un correcto desarrollo de la boca, de la mordida, de la deglución y de la respiración del bebé, algunos estudios relacionan la lactancia materna prolongada con la aparición de caries. Estos estudios señalan que las probabilidades de caries son mayores cuando la lactancia materna es prolongada y frecuente por la noche y por el día. Esta situación produce una acumulación de leche en los dientes que, combinada con una falta de higiene bucal, da lugar a la caries en el bebé.

Los primeros estudios, realizados a finales de los 70 de la década pasada por Brams y Maloney, Gardner, Norwood y Eisenson y Kotlow, recomendaban restringir la lactancia materna alrededor de los 12 meses del bebé para prevenir la caries. Una amplia revisión de diferentes estudios, entre los que se incluía éste, señala que los autores utilizaron un muestra limitada (2 bebés alimentados con biberón y 7 bebés alimentados con lactancia materna) y de escasa evidencia científica.

Un nuevo estudio realizado por los investigadores Benjamin W. Chaffee, Carlos Alberto Feldens y Márcia Regina Vítolo ha vuelto a estudiar la relación entre lactancia materna prolongada y la aparición temprana de la caries. El estudio, Association of long-duration breastfeeding and dental caries estimated with marginal structural models, publicado  en Annals of Epidemiology. Los resultados señalan que casi la mitad de los bebés amamantados hasta los 2 años presentaba alguna caries.

¿Cómo se realizó el estudio?

En el estudio participaron 715 bebés procedentes de familias con escasos recursos de Porto Alegre, Brasil. Se realizaron 3 revisiones a los 6, 12 y 38 meses. A los 6 meses se midió la cantidad de leche y de otros líquidos que consumían los bebés. Entre los 12-38 meses, se analizó el consumo de 29 alimentos, entre ellos carne, frutas, verduras, galletas, chocolates… . En cada visita los bebés fueron evaluados por dentistas.

Los investigadores comprobaron que a mayor edad, mayor incidencia de caries en los bebés amamantados. De hecho, de los bebés amamantados hasta los 24 meses, el 40% presentaba alguna caries. Este porcentaje se elevó hasta el 48% en caso de seguir tomando el pecho más allá de los 2 años. Se cree que una de las razones de este aumento es una combinación de lactancia materna con otros alimentos sólidos y líquidos, que contienen altas cantidades de azúcar.

«Nuestro estudio no sugiere que la lactancia provoca caries«, señala B. Chaffee.  Y añade: «es necesario realizar más estudios sobre el tema«. El autor aconseja a las madres que optan por la lactancia materna prolongada, establecer unos hábitos diarios de higiene bucal a partir del nacimiento del primer diente. Para realizar una correcta limpieza bucal del bebé, conviene limpiar las encías con una gasa o paño humedecido y los dientes con un cepillado suave después de cada toma.

¿La lactancia materna puede favorecer la caries en los bebés? 

Para otros muchos autores, gran parte de la literatura científica que existe sobre este tema es vaga, inexacta y cuestionable.

Estos autores señalan que la lactancia materna prolongada no favorece la caries en el bebé por diferentes razones.

La caries es una enfermedad multifactorial. Para que se produzca, es necesaria la intervención de los siguientes factores:

  • Azúcar o glucosa: Los hábitos de alimentación influyen mucho en la presencia de caries. Los primeros alimentos que ofrecemos al bebé contienen una elevada cantidad de azúcar. Ej: plátano, zumos, galletas. No obstante, el azúcar o la glucosa por si solos no producen caries. Para ello es necesario la presencia de bacterias.
  • Bacterias: La bacteria Strep Mutans metaboliza la glucosa y/o azúcar y elimina los ácidos que protegen el diente. Así, de esta forma, la bacteria va destruyendo el esmalte y penetrando en el diente hasta formar una caries. ¿Cómo pasa esta bacteria al bebé? Esta bacteria puede trasmitirse a través de los padres, familiares, cuidadores o hermanos mediante situaciones como soplar la comida del bebé, compartir un vaso de agua, limpiar el chupete con la boca, soplar la comida para enfriarla.
  • Saliva: La saliva actúa como un protector natural del diente. Durante la noche, el flujo de saliva es menor. Al no haber saliva, las bacterias actúan ante la presencia de azúcares y glucosa. Además, los dientes recién erupcionados tienen el esmalte sin mineralizar. De forma que el riesgo de caries es mayor.
  • Dientes: La calidad del diente y su estructura.
  • Higiene: Los malos hábitos de higiene o no limpiar los dientes después de cada toma pueden favorecer la aparición de caries.

¿Existen otros factores que favorecen la aparición de caries?

Sí, estos factores se encuentran en el útero.

El riesgo de caries en el bebé puede incrementarse si durante el embarazo la madre ha fumado, ha sufrido estrés o ha sido medicada bajo supervisión médica para tratar alguna enfermedad.

¿Son iguales las «caries del biberón» y las «caries del bebé»?

No. La caries del biberón se produce cuando añadimos al chupete o biberón del bebé miel o azúcar.

También se puede producir cuando los bebés se quedan dormidos con el biberón en la boca.

Los dientes más afectados son los incisivos delanteros.

 

Bibliografía:

Chaffee Benjamin W.  et al. Association of long-duration breastfeeding and dental caries estimated with marginal structural models . Annals of Epidemiology. Obtenido el 1 de abril de 2014.

Mohebbi SZ et al. Feeding habits as determinants of early childhood caries in a population where prolonged breastfeeding is the norm. Epidemiol. 2008 August, 36(4): 363-9. Obtenido el 1 de abril de 2014.

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