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jueves, diciembre 12, 2024
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Buenas y malas costumbres en la alimentación del niño de 1 a 2 años

Contenido revisado y aprobado por el equipo editorial

Todos los niños, tarde o temprano, aprenden a comer como un adulto. Para enseñarles a comer de forma adecuada entre el primer y el segundo año, los padres podemos sentarlos en la mesa junto a la familia. ¡Así pronto querrán coger el tenedor y la cuchara! También es normal que los niños de 1 a 2 años tengan algún capricho o manía. En este caso, puedes ofrecer a tu hijo otras alternativas igual de saludables para ayudarle a comer de todo.

CONSIDERADOS BUENOS ALIMENTOS

Si los padres comen sano, su bebé puede comer lo mismo. Si se da a elegir entre una fruta y una chocolatina, ¡pocos niños eligen la fruta!

Por tanto hay que ofrecer alternativas sanas (por ejemplo entre un yogurt y una pera, entre croquetas y tortilla, entre tostada con foie-gras o con quesito).

 

LOS MODALES EN LA MESA Y EL EMPLEO ADECUADO DE LOS CUBIERTOS

Si el bebé come junto a su familia la mayor parte de las veces, tenderá a imitar los modales y movimientos. Querrá coger en seguida la cuchara y el tenedor. Si come aparte, siempre le da otra persona, le obligan… probablemente tardará en aprender.

Manejar los cubiertos requiere cierta habilidad motriz que se logra sólo con práctica, tiempo y paciencia. Es normal que los niños pequeños manchen, derramen comida y se ensucien la ropa.

GUSTOS, CAPRICHOS Y PREFERENCIAS

La mayoría de los adultos ha tenido alguna manía en sus alimentos cuando niños. Tarde o temprano, la mayoría de las personas comen «de todo» (lo que pueden).

Está demostrado que insistir en exceso suele dar resultados contradictorios o negativos. Convertir la comida en un “problema” significa que el niño sea el centro de atención y refuerza su comportamiento negativo.

Algunos «caprichos» o manías pueden consentirse: tarde o temprano, el niño se cansará de comer todos los días lo mismo.  La alimentación debe ser variada, pero si los alimentos que prefiere el niño aportan todos los nutrientes esenciales, tampoco hay que llevarlo al extremo. Para comprobarlo, basta con ver si el niño está alegre y activo y su crecimiento se mantiene.

Sobre el autor

Miriam Rodríguez Murphyhttps://www.elbebe.com/
Especialista en la redacción y edición de contenidos sobre una amplia variedad de temáticas desde el embarazo y el parto hasta la crianza y el desarrollo y la educación de bebés y niños. Miriam Rodríguez Murphy creó Elbebe.com en el año 2000, un portal pionero en ofrecer información de calidad y contrastada por especialistas sobre maternidad e infancia. Cuenta desde sus inicios con un equipo editorial formado por médicos especialistas, psicólogos y profesionales sanitarios para supervisar todos los contenidos relacionados con la salud de la madre y del bebé y niño. Se ha dedicado durante toda su trayectoria profesional a la redacción y edición de una amplia gama de contenidos, especializándose desde hace 23 años en información para madres y padres. Miriam Rodríguez es un referente en la creación de webs sobre maternidad e infancia en España y América Latina. Ha publicado artículos en medios online como Serpadres y MarieClaire, entre otros.

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