Durante el primer #BlogTripPulevaInfantil, organizado por el Instituto Puleva de Nutrición y celebrado en Granada, se trataron los grandes retos de la alimentación infantil en el nuevo milenio. Se habló sobre las cantidades de alimentación adecuadas para los niños, los percentiles y la obsesión por las medidas de los padres, las alergias alimentarias, la necesidad o no de dar suplementos de vitaminas y el controvertido Baby Led Weaning (BLW), es decir dar a los niños alimentos de texturas no trituradas.
Tras la reunión con los expertos, en Elbebe.com preguntamos a algunas de las madres blogueras que asistieron cuáles son sus principales dudas sobre alimentación infantil.
Cuestionario para madres sobre alimentación infantil:
1. ¿Qué es lo que más te preocupa relacionado con la alimentación de tus hijos? 2. En este sentido, ¿cuál es la mayor dificultad a la que te has enfrentado? 3. ¿Qué aspectos te han resultado novedosos del foro? ¿Los expertos han resuelto tus dudas? ¿Has echado en falta algo? |
Bea, de Pintando una mamá
Me preocupan los menús escolares, supuestamente elaborados por nutricionistas, pero con gran cantidad de hidratos de carbono.
1. Yo te diría que una de mis principales dificultades es la de encontrar productos infantiles realmente adaptados a ellos. Aunque vayan dirigidos al público infantil, a veces una lee los ingredientes y se echa a temblar.
2. Otro tema que me preocupa es la comida real en los colegios. Aunque algunos menús supuestamente están elaborados por nutricionistas, a veces inicialmente, una se asusta de ver la cantidad de hidratos de carbono que hay en los menús frente a las proteínas, por ejemplo. Y por último, un poco lo que comentamos en el foro, el típico, ¿lo estaré haciendo bien?…
3. Me ha resultado más novedoso saber todo lo que hay detrás de un proceso de fabricación de leche y conocer todas las deficiencias alimentarias que tienen actualmente los niños. Los expertos han resuelto las dudas en privado.
Blanca, de Mimos para mamá
La única dificultad que recuerdo fue compaginar la lactancia materna con mi incorporación al trabajo. Mi hija no quería el biberón y las primeras semanas no comía nada hasta que yo llegaba. Menos mal que la introdujimos pronto en los cereales y los agobios remitieron.
1. Que adquieran unos hábitos saludables, que aprendan a comer de todo y también a tener una buena conducta en la mesa. Creo que los buenos hábitos que se adquieren desde pequeños, les acompañarán en el futuro.
2. He tenido buena suerte. En casa, raras veces hemos tenido problemas en la mesa porque no haya querido comer algo, aunque reconozco que le ha costado probar ciertos alimentos. Al final, come de todo y bien. Le encanta la fruta, pero su asignatura pendiente siguen siendo algunas verduras, que compensamos con otras que le gustan. Pero en general es buena comedora.
3. Me ha llamado mucho la atención las carencias de Omega 3 y Hierro en niños y la importancia que estos aportes tienen en sus organismos. Por otra parte, me sorprendió que el hecho de alargar la ingesta de papillas y purés sea tan nefasta. Ya conocía, por propia experiencia y sentido común, que es recomendable reducirlas cuanto antes. Pero escuchar estas recomendaciones de la boca de los expertos, me convencieron aún más. En el foro eché en falta algunas ideas de menús para favorecer el consumo adecuado y necesario de los aportes que más carencia tienen los más pequeños, y nosotros mismos.
Melisa, de Me crecen los enanos
La mayor dificultad a la que me he enfrentado relacionada con la alimentación de mis hijos son los abuelos y su dadivosidad con las chuches. De hecho, a mi padre le llamamos «el abuelo caramelo«.
1. Lo que más me preocupa es que tengan una oferta de alimentos sanos a su alcance, no forzarles a comer, no obligarles, respetar sus gustos y apetito. Y también, ¡que la hora de la comida sea un buen rato en familia y no un motivo de estrés para nadie!
2. Los abuelos y su dadivosidad con las chuches, a mi padre le llamamos el «abuelo caramelo». ¡No hay manera!
3. El informe de la Dra. Cristina Campoy Folgoso, profesora titular de Pediatría de la Universidad de Granada y miembro del Comité de Nutrición de la Sociedad Europea de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica (ESPAGHAN) fue muy interesante, también el intercambio posterior. Siempre saben a poco. El tiempo era muy limitado, fue apenas una aproximación, pero tengo deberes para leer en casa 🙂
Laura, de Entre madres
Me preocupa que mi hija copie algunos malos hábitos de sus compañeros o amigos. Claro que mi hija también come «guarradas» de vez en cuando, pero no como hábito diario.
1. Fundamentalmente lo que más me preocupa son dos cosas: que coma alimentos sanos y si puede ser, libres de químicos (desde hace dos años, hacemos la mitad de la compra en una tienda ecológica, y reconozco que cada vez me da más mal rollo ver los estantes de los supermercados tradicionales llenos de bandejas de plástico con todo tipo de comida envasada), y de forma variada, algo que sé que en el colegio se cumple (en casa, un poco menos, la verdad). También me preocupa un poco que el día de mañana copie algunos malos hábitos de sus compañeros y/o amigos. En la guardería me hice muy amiga de una madre que cada día le daba de merendar a su hija, amiga de Martina, mini bollería industrial, un zumo de tetra brik y los famosos Aspitos. Claro que Martina también come «guarradas» de vez en cuando, pero no como hábito diario.
La mayor dificultad relacionada con la alimentación de mis hijos es la falta de un discurso homogéneo por parte de los pediatras, al menos en la Comunidad de Madrid.
2. La falta de un discurso homogéneo por parte de los pediatras, al menos en la Comunidad de Madrid, donde dependiendo del centro de salud al que vayas, te dicen una cosa u otra, sobre todo durante el primer año, a la hora de introducir nuevos alimentos en su dieta. Y antes también dudaba de si le daba demasiados hidratos de carbono y pocas proteínas (en casa comemos bastante más de lo primero), aunque me quedé un poco más tranquila después de asistir a otra charla con expertos de nutrición donde nos dejaron claro que el 90% de los niños españoles consumen más del doble de las proteínas recomendadas.
He aprendido que el hierro procedente de origen animal (hígado, carnes rojas, …) se absorbe mucho mejor que el de origen vegetal (lentejas).
3. La verdad es que he disfrutado un montón en este foro porque a mí me encanta este tema y sinceramente he descubierto muchas cosas que, además, nos han explicado con transparencia, sin comulgar con ningún producto y/o marca. Por supuesto, sigo teniendo algunas dudas, pero he aprendido cosas muy interesantes. ¡Yo pensaba que las lentejas tenían muchísimo hierro! Y resulta que este mineral solo se absorbe en un 5% si es de origen vegetal (legumbres, espinacas) y en un 25% si es de origen animal (hígado, carnes rojas). Lo único que he echado en falta es que el foro durara un poco más para que todas pudiéramos haber formulado nuestras dudas en el turno de preguntas.
Martina, de No sin mis hijos
La mayor dificultad relacionada con la alimentación ha sido con la introducción a los alimentos. A mi hija le costó tomar frutas y a mi hijo los purés. Al final es un proceso que lleva su tiempo, en unos niños más y en otros menos.
1. En general tengo suerte porque son unos niños que diríamos comen muy bien. Mi única preocupación ahora es que adquieran unos buenos hábitos alimenticios y que aprendan a llevar una alimentación saludable, aunque supongo que luego de mayor harán lo que quieran y tendrá los ineludibles momentos de comer guarrerías.
2. Como ya te decía, en general he tenido suerte, pues comen bastante bien. Las mayores dificultades las he tenido en la introducción de alimentos cuando eran bebés, pero nada que no le haya pasado al resto de las madres. Con mi hija mayor fueron las frutas lo que más nos costó y con mi hijo fueron los purés. Recuerdo echar en los purés cacitos de cereales y de todo para intentar que se los comiera. Al final creo que es un proceso que lleva su tiempo, en unos niños más y en otros menos.
3. Me ha encantado que desde su punto de vista profesional hayan desmitificado determinados aspectos, viniendo a corroborar teorías que ya muchas madres por lógica aplicábamos. Por ejemplo, el hecho de que no hay que obsesionarse con los percentiles y que no hay una única manera de alimentar correcta.
Grandes retos de la alimentación infantil en el nuevo milenioEl ritmo de vida actual y diversos factores socioeconómicos están afectando seriamente al cumplimiento del patrón de alimentación que sería idóneo en los niños pequeños. La obesidad o los deficit de nutrientes esenciales son, en otros, algunos de los problemas que afectan a la población infantil. Por esta razón, el Instituto Puleva de Nutrición, entidad que promueve el fomento de hábitos saludables entre la población, organizó el primer #BlogTripPulevaInfantil en Granada para que expertos relevantes y bloggers intercambiasen ideas y preocupaciones sobre la alimentación infantil. |