Cuando los padres tienen que dejar a sus bebés al cuidado de otras personas surgen muchas dudas y temores. Obviamente, todos los padres desean dejar a sus hijos en el mejor lugar posible. Sin embargo, muchas veces no tienen suficiente información sobre las alternativas disponibles a la guardería. Las Madres de Día son una de ellas.
La figura de las Madres de Día es aún poco conocida en España, pero se está extendiendo rápidamente. Sin embargo, en países como Francia, Suiza o Inglaterra estas mujeres están muy reconocidas.
Las Madres de Día son una alternativa a las guarderías, a las cuidadoras o a los abuelos cuando los padres tienen que dejar a su bebé al cuidado de terceros porque ambos tienen que trabajar.
Las Madres de Día son mujeres que acogen en su propia casa a un grupo reducido de niños para cuidarlos mientras los padres están trabajando.
Por lo general, las Madres de Día son mujeres que tienen la experiencia de la maternidad y la crianza de sus propios hijos, que poseen cierta formación pedagógica y que vocacionalmente se orientan al cuidado de los niños pequeños.
Generalmente, el grupo se compone de un máximo de 3 o 4 niños menores de 3 años y se ofrece un horario de atención de 8 horas.
Las Madres de Día ofrecen a los niños juegos, actividades, salidas al jardín o al parque, desayuno, comida y siesta. El horario de los niños es flexible, en función de las necesidades de cada padre.
El coste económico de los servicios de una Madre de Día es variable, en función de las horas que vaya a estar el niño con ella. No obstante, por norma general suele situarse entre 300 y 500 euros, aproximadamente.
Cada Madre de Día tiene su propia tendencia pedagógica. Aún así, por norma general suelen ser afines a la pedagogía respetuosa de los ritmos de desarrollo de cada niño, dando gran importancia a las experiencias afectivas de los mismos y a la crianza con apego.
La actividad de las Madres de Día todavía no está oficialmente reconocida en España, por lo que estas mujeres no tienen por qué poseer ningún título oficial para ejercer su trabajo. No obstante, muchas de ellas poseen conocimientos de pedagogía y educación.
Además, la mayoría de ellas aman el trabajo que realizan y se sienten profundamente satisfechas de ser Madres de Día.