Fumar afecta a la fertilidad de las mujeres fumadoras, también de las fumadoras pasivas. También afecta a los hombres puesto que el tabaco también afecta a la cantidad y la calidad de sus espermatozoides.
En cuanto a los malos hábitos que hay que tratar de evitar antes de quedarse embarazada y durante la gestación, el tabaco es lo primero que previsiblemente el ginecólogo aconsejará abandonar como medida prenatal.
Las mujeres fumadoras, lo primero que tienen que tener en cuenta es que el tabaco reduce las posibilidades de embarazo.
Por eso, se aconseja dejar de fumar antes y durante el embarazo, ya que el tabaco puede ser perjudicial para el desarrollo del feto y provocar abortos espontáneos, así como partos prematuros. Además, está relacionado con el bajo peso de los bebés recién nacidos.
El tabaco duplica el riesgo de que la mujer tenga un embarazo ectópico. Este tipo de embarazos se producen cuando el feto comienza a desarrollarse fuera del útero, normalmente en las trompas de Falopio.
La afectación se puede producir también en el caso de que la madre sea fumadora pasiva.
Fumar también puede tener repercusiones en el hombre, ya que reduce el número de espermatozoides y afecta a la calidad de los mismos.
Lo ideal es abandonar este hábito lo antes posible, pero si su adicción es muy fuerte, intenta lo siguiente antes de quedarte embarazada:
- Evita fumar nada más levantarte, con el estómago vacío. Es preferible hacerlo después de las comidas.
- Reduce las dosis a lo largo del día.
- No fumes más de 10 cigarrillos.
- Evita los espacios con humo.
- Planifica una fecha para dejar de fumar.
- Practica algo de ejercicio.
- Bebe dos litros al día de agua.
- Recurre a la ayuda de un médico especialista.
