Raquel Sánchez Silva (Plasencia, 1973) es una conocida periodista que acaba de ser mamá por partida doble: ha sido mamá de mellizos y ha publicado su segundo libro «Tengo los óvulos contados» (Editorial Planeta). En Elbebe.com la hemos entrevistado para conocer de primera mano sus opiniones sobre un tema tan de actualidad, como es la reproducción asistida y el avance de la edad materna para ser madre. Raquel es cauta en sus respuestas y muy comprensiva con las mujeres (hayan sido madres o no). Y si no, lee.
Madres añosas, ¿una realidad?
Pregunta: La maternidad tardía es una realidad. La media de edad a la que se tiene el primer hijo hoy se sitúa alrededor de los 32 años. Si las mujeres fuéramos más conscientes de que tenemos los óvulos contados, ¿crees que seríamos madres antes?
Respuesta: Creo que si las mujeres tuvieran más información planificarían su maternidad de otra manera.
Esto no quiere decir necesariamente que sean madres antes pero, por ejemplo, creo que congelarían óvulos antes, en el caso de que quisieran hacerlo.
En general, manejarían de otra forma sus tiempos.
P: En el caso de la congelación de óvulos da la sensación de que se abre una puerta de esperanza en la carrera contrarreloj para ser madre cuando el tiempo apremia y la edad ya no juega a nuestro favor, ¿crees que esta técnica puede crear falsas expectativas en las mujeres?
La congelación de óvulos no garantiza nada, no es ese seguro perfecto que nos venden.
R: La congelación de óvulos es una técnica que ayuda mucho.
Pero las mujeres deben saber que las posibilidades de esos óvulos (tal y como ocurre en un proceso natural) son menores a partir de los 35 y muy escasas a partir de los 40.
La congelación de óvulos no garantiza nada, no es ese seguro perfecto que nos venden pero, desde luego, hacerlo entre los 20 y los 35 años o hacerlo cerca de los 40, lo cambia todo.
P: ¿Llegaremos a ser madres en la década de los 50?
La edad de las madres avanza y mucho, muy rápido, tanto como evoluciona la reproducción asistida.
R: Quién sabe qué ocurrirá en el futuro.
La edad de las madres avanza y mucho, muy rápido, tanto como evoluciona la reproducción asistida.
Ahora mismo, no se suele tratar a mujeres mayores de 50.
El futuro en ese sentido, seguro que nos sorprenderá.
¿Por qué esperamos para ser madres?
P: “La mayoría de ellas (de las mujeres) necesita creer que el tiempo se estira gracias a la reproducción asistida, pero lo ideal sería que aprendiesen a marcar sus tiempos con objetividad”, señala la doctora Miranda, la protagonista principal de tu novela. ¿A qué esperamos las mujeres? ¿Cuáles son nuestros miedos? ¿Qué es lo que falla en nuestra sociedad? ¿Cómo se puede cambiar esta situación?
La sociedad no respalda [a las madres] en temas tan lógicos e importantes como la conciliación laboral y familiar.
R: Esperamos que el tiempo se estire para encontrar ese “momento perfecto”.
¡Claro que existe el miedo a que el Mercado Laboral las penalice! Todos sabemos que eso aún ocurre.
La sociedad aplaude a las madres como si fueran heroínas (otro error porque no son mejores ni peores que una mujer que no quiere ser madre).
Y sin embargo, no las respalda en temas tan lógicos e importantes como la conciliación laboral y familiar. Todas las situaciones, por complejas que sean, se pueden cambiar. Es una necesidad social urgente.
P: En tu caso has vivido un doble proceso: has sido paciente y has realizado una intensa labor de documentación sobre el tema de la reproducción asistida. ¿Qué se siente cuando una mujer decide tener hijos y éstos no llegan?
Algunas mujeres lo pasan realmente mal, viven el proceso con mucha angustia.
R: Generalizar en esta respuesta sería una frivolidad.
Los sentimientos de cada mujer son únicos.
Me consta que algunas mujeres lo pasan realmente mal, viven el proceso con mucha angustia.
Lo he confirmado en mis entrevistas y en los foros – esos pozos de dolor- en los que he indagado.
Para eso he escrito este libro, para aliviar ese dolor innecesario que padecen muchas mujeres.
Tabús, mitos y leyendas sobre la reproducción asistida
P: Debido a la información que aportas sobre el tema, en la voz de los diferentes personajes, ¿qué aspectos desconocías de la reproducción asistida y qué es lo que más te ha sorprendido?
No podemos ser madres cuando queramos, a nuestro antojo.
R: Me ha sorprendido lo mismo que le sorprendería a cualquier mujer que solo tiene las respuestas del Dr. Google o los casos personales que le cuentan amigas o familiares.
Ahora sé que los 40 no son los nuevos 30 en materia de fertilidad por muy estupendas que estemos y que no podemos ser madres cuando queramos, a nuestro antojo.
Todo es más complejo de lo que queremos creer.
P: En la voz de Miranda señalas que antes de dar el paso de la reproducción las mujeres prueban todo tipo de trucos para ser madres. ¿Cuáles son los que más te han sorprendido?
[Algunas mujeres para ser madres] prueban trucos que son realmente peligrosos como tomar medicamentos sin supervisión médica.
R: Esos consejos que no vienen de ningún profesional.
De esos, hay algunos muy divertidos, que no hacen daño, como tomar todo tipo de productos naturales, determinadas posturas, noches de luna, hacer el pino…esas cosas…
Y luego hay otros trucos que son realmente peligrosos: medicamentos que han tomado otras (que lo cuentan), por ejemplo, y que algunas mujeres toman sin supervisión médica.
P: En el libro señalas que existen muchos tabúes sociales sobre la reproducción asistida, incluso mucha desinformación, muchos mitos. ¿Cuál ha sido la mayor barbaridad que has leído o escuchado en este tiempo?
Un centro clínico que promete o garantiza un bebé en su mensaje es mucho más criticable.
R: He leído muchas barbaridades en los foros, pero las mujeres que escriben en ellos no son culpables de compartir esa información.
Mucho más criticable es un centro clínico que promete o garantiza un bebé en su mensaje, o que te anima a congelar óvulos con 40 y echarte a dormir.
Las emociones y los comentarios hirientes sobre maternidad
P: En Tengo los óvulos contados también señalas que existe un tipo de madre, “madres pavo real”, que se siente más mujer por haber engendrado. Esto me hace pensar en una corriente, muy de actualidad, que señala que se debe dejar de preguntar y juzgar a las mujeres que no son madres. Teniendo en cuenta todo esto, antes de ser mamá, ¿cuál es el comentario más hiriente al que te has enfrentado?
Una periodista me ha dicho un comentario [hiriente] que nunca había escuchado: “Vas a ser un jardín sin flores”.
R: ¿Personalmente? Pues ese comentario que presiona a todas las mujeres. Todas, sin excepción: “Se te va a pasar el arroz”.
Es realmente feo, aunque hoy, una periodista me ha dicho otro mucho peor, que nunca había escuchado: “Vas a ser un jardín sin flores”.
¡Terrible!
P: El personaje principal, Miranda, una madre profesional que trabaja en una reputada clínica de reproducción asistida, desgrana el proceso emocional que viven muchas parejas o mujeres que desean ser madres y describe cómo son los diferentes tipos de tratamientos y los diferentes tipos de pacientes. ¿Cuál es la parte más difícil para una pareja, ya sea mujer u hombre?
La parte más difícil para los pacientes es que asuman que el NO también existe.
R: Depende mucho de la pareja, pero creo que la parte más difícil en general para los pacientes es que asuman que el NO también existe.
No todos los tratamientos logran su objetivo. Muchos sí pero todos, no.
La necesidad de informarse antes de ser madre
P: ¿Qué mensaje lanzarías a las mujeres que todavía no son madres?
R: Que no se dejen presionar por esa parte de la sociedad que sigue considerando a las mujeres que son madres como sus “campeonas”, que tomen las decisiones que deseen desde la información y la ayuda de profesionales- no por las anécdotas deformadas de historias de otros- y que intenten mitigar las presiones y la angustia normalizando cualquiera de los procesos que tienen que ver con la maternidad (entre ellos también, la posibilidad de no ser madre por elección).
P: ¿Por qué recomendarías Tengo los óvulos contados?
R: Porque retrata el mundo actual de la reproducción asistida en España y desmonta muchas de las mentiras que nos pueden llevar a tomar decisiones equivocadas y tardías.
No se trata de hacer las cosas antes, sino de hacerlas a tiempo.
Tengo los óvulos contados, una conmovedora novela sobre los procesos de reproducción asistida
Tras su primera publicación, Mañana, a las seis, Raquel Sánchez Silva nos sorprende con otra cautivadora novela, Tengo los óvulos contados, sobre un tema muy de actualidad: la reproducción asistida. Página a página y en la voz de la protagonista principal, la doctora Miranda, una reputada profesional que trabaja en una clínica de fertilidad, realiza una radiografía de nuestra sociedad, que retrasa y a la vez, dificulta el acceso a la maternidad. Excelentemente documentada, la autora recoge la mayoría de los casos por los que una persona acude a un centro de reproducción asistida. Y también desgrana los procesos emocionales que vive cada paciente. Sin mentiras y con un gran conocimiento sobre la materia: el personal (como paciente de una clínica de reproducción asistida) y el profesional (como periodista), llega al corazón de los lectores, sea cual sea su circunstancia personal. ¿El precio? 18,50 € |