El síndrome de la posición inadecuada es un problema frecuente en los inicios de la lactancia. Muchas veces dificulta en gran medida la instauración de la misma. Es importante que la madre conozca cómo se manifiesta para poder detectarlo. El asesoramiento especializado es esencial para corregirlo.
El síndrome de la posición inadecuada es un problema frecuente en la lactancia.
Normalmente, el bebé mama apretando los conductos galactóforos con la lengua. Pero cuando no está colocado correctamente (por ejemplo, si sólo agarra el pezón en vez de la areola), tiene que hacer vacío para obtener leche. Entonces ejerce más fuerza sobre una superficie menor del pecho. Esto le produce dolor a la madre y grietas.
Cuando esto sucede, la duración de las tomas se incrementa porque la leche sale muy poco a poco. A veces el bebé mama durante más de media hora en un solo pecho y no se suelta por sí mismo, le tiene que sacar la madre el pezón. Aún así, el bebé no parece saciado y al poco tiempo vuelve a demandar el pecho.
La producción de leche se vuelve excesiva (a más succión, más producción, aunque la succión sea ineficaz) y el vaciado es insuficiente (el bebé no puede sacar a leche completamente). Esto puede provocar una obstrucción del conducto mamario o una mastitis.
Ante esta situación, el organismo de la madre reacciona intensificando la producción de oxitocina y de leche inicial, la cual es pobre en grasas. De esta manera, el lactante ingiere mayoritariamente esta leche inicial, pobre en calorías. Regurgita y vomita con frecuencia porque tiene el estómago lleno, pero sigue sintiendo hambre porque lo que ingiere es poco nutritivo.
En este artículo sobre el síndrome de la posición inadecuada:
¿Cómo saber si el bebé mama en una posición inadecuada?
Los síntomas del síndrome de la posición inadecuada son variables, pero en la mayoría de los casos coincide la larga duración de la toma, que el bebé no suelta el pecho espontáneamente y el dolor en los pezones de la madre.
Causas de la mala colocación del bebé durante la lactancia
Existen varios factores que contribuyen a una colocación inadecuada del bebé durante la lactancia materna:
- La separación del bebé y la madre en la primera hora postparto puede interferir con los reflejos del recién nacido.
- La confusión con tetinas y chupetes cuando la lactancia no está bien establecida.
- Falta de modelos culturales. Las madres no han visto a otras mujeres dar el pecho y no saben cómo deben colocar al bebé.
- La creencia extendida de que es normal que dar el pecho duela y que hay que aguantarlo. El dolor en la lactancia, en realidad, indica que hay un problema.